Hoy os traemos esta elaboración sencilla e ideal para que la deguste toda la familia. Acompaña tus mejores momentos de estos bocados con sabor a nuestros mejores quesos.
INGREDIENTES
- 250 g de harina
- 2 huevos
- 125 g de mantequilla
- Leche
- 1/2 taza de crema de leche
- 250 g de queso rallado
- 4 cucharaditas de levadura en polvo
- Romero
- Una pizca de pimienta
- Una pizca de sal
PREPARACIÓN
- Mezclar la harina con la sal y la levadura en polvo.
- Después de templar la mantequilla, la incorporamos.
- Agregamos los huevos, el romero y echamos una pizca de pimienta espolvoreada.
- Llega el momento del ingrediente principal: el queso. Puedes usar cualquiera de nuestras variedades, la que más te guste o la más adecuada para la ocasión: el clásico Tres Oscos, Berenguela para quienes cuidan la línea o Asunción para los paladares más exigentes.
- Utilizamos la leche para ligarlo todo e ir formando, poco a poco, una masa uniforme.
- Espolvoreamos un poco de harina encima de la meseta y trasladamos la masa para moldearla.
- La separamos en dos partes y, luego, las estiramos bien con el rodillo.
- Doblamos cada lámina por la mitad y vamos cortando los scones.
- En una bandeja, extendemos un poco de mantequilla, colocamos encima los scones y los pintamos con crema de leche.
- Horneamos 20 minutos después de precalentar el horno a 200° C. Es importante que estemos pendientes del color que van adquiriendo ya que hay que retirarlos cuando empiecen a dorarse.
Un, dos, tres… ¡scone! Una auténtica delicia en un solo bocado.