Se presenta en corteza negra y guarda todo el sabor, suavidad y textura del semicurado. Se elabora con leche de vaca y es la receta más tradicional de Queso Tres Oscos, siguiendo la elaboración que seguían los monjes del Monasterio de Villanueva de Oscos desde el s. XII
Su formato de 1 kg es ideal para hacer una buena repartición en la mesa.